Guzmán y Pesce anunciarán las nuevas medidas para tratar de frenar la dinámica de la crisis

El Gobierno ya definió una serie de medidas para tratar de cambiar la dinámica de crisis que se agudizó desde el anuncio del súper cepo. Las medidas, que se anunciarían en las próximas horas, buscarían, por un lado, aumentar la oferta de dólares en el mercado cambiario, con una rebaja en la retenciones de soja de 3 puntos por 90 días (iría incrementánse gradualmente de nuevo hasta el 33%), con la intención de que los productores vendan parte de la cosecha remanente que todavía tienen en silo bolsas en los campos. En los cálculos que CIARA, la cámara de nuclea a las principales empresas cerealereas, habría unos U$S 10.000 millones en granos en los campos de los cuales, según le dijo la entidad al ministro Guzmán, unos U$S 8.000 millones podrían ingresar si se abra esa “ventana fiscal”.

En el Gobierno no son tan optimistas con la estimación. Creen que a lo sumo serían 7.000 millones y no saben cuánto de eso podría efectivamente venderse en los próximos meses con el incentivo fiscal. Pero aún así la situación crítica en que se encuentra el Banco Central no dejaría demasiadas opciones.

Otra de las medidas sería la devolución de compensaciones por la suba de retenciones de fines del año pasado para los pequeños productores sojeros. También habría baja de retenciones para la carne.

Desde el Banco Central, a su vez, se anunciaría una serie de medidas para “estimular” el ahorro en pesos: baja de encajes a los bancos para estimular la oferta de plazos fijos dolar link y habrá que ver si finalmente también se decide una suba de tasa para dar incentivos a los ahorristas para que no corran al dólar.

Desde  el anuncio del “super cepo” (15/09) más que “tranquilizar la economía”, como dice el Ministro Martín Guzmán, se disparó todavía más la desconfianza. Para colmo con la tardanza en actualización de los sistemas de los bancos para vender dólares, se produjo de facto “feriado cambiario” hasta el viernes pasado (25/9).

Sin embargo, pese a que la venta de dólar ahorro –ahora con el recargo del 35%, es decir, a un valor de 132 pesos– estuvo paralizada el BCRA siguió vendiendo reservas. La brecha cambiaria con los “dólares alternativos” se mantuvo cerca del 90% en los últimos días y los ahorristas aceleraron los retiros de depósitos en dólares.

La brecha cambiaria entre el dólar oficial mayorista y el “dólar blue” actualmente se ubica en 92% .El “dólar blue” pasó de 131 pesos (el 15/09) a 147 pesos. Mientras que el “contado con liquidación”, el instrumento preferido por las empresas para dolarizarse se mantiene arriba de los 145 pesos.

Entre el 15/09, día que se anunció el súper cepo, y el 25/09 (último dato oficial), el BCRA vendió 472 millones de dólares para evitar una suba más rápida del tipo de cambio oficial. Un promedio de ventas diarias de U$S 59 millones. El ritmo es menor a los más de U$S 100 millones diarios que vendía el Central en la primera quincena de abril, pero es igualmente insostenible. De hecho, el dato oficial del viernes pasado (15/9), primer día de reinicio parcial de la venta de los 200 dólares por homebanking (con todas las nuevas restricciones), sorprendió a todos: ese día el Central vendió U$S 160 millones.

El dato es muy preocupante teniendo en cuenta que siempre, en las primeras dos semanas del mes, se concentra casi la totalidad de las compras de “dólar ahorro”.

Pero además el monto de reservas disponibles del Banco Central no da demasiado tiempo para tratar de modificar el curso de una nueva crisis cambiaria. De ahí que en el equipo económico trabajan para anunciar las nuevas medidas cuanto antes.

Las reservas netas en el BCRA (sin incluir Swap de monedas con China, encajes bancarios, depósitos del Gobierno y préstamos con organismo internacionales) son apenas u$S 6.408  millones  (al 29/9). Pero dentro de esas reservas netas se contabilizan casi U$S 3.700 millones de oro (ver gráfico).

Vale señalar, que con las últimas aclaraciones del BCRA sobre el “dólar ahorro” se ajustó el acceso a la compra de dólares a solo el 25% de las 4 millones de personas físicas que compraban dólares en los meses previos (aproximadamente un millón de personas). La última restricción que se conoció es que los empleados de empresas que hayan recibido ayuda estatal para pagar salarios (ATP) tampoco tendrán acceso al “dólar ahorro”.  En teoría, para el mes de octubre el BCRA no debería tener una demanda mayor a los u$S 200 millones por “dólar ahorro”.

Pero si la oferta de dólares de los exportadores sigue retrayéndose, no aumenta la oferta de dólares de la exportación y los importadores hacen fila para pagar importaciones al tipo de cambio oficial mayorista de 76 pesos, el Banco Central seguirá perdiendo reservas.

El otro frente de tormenta que abrió el súper cepo son los depósitos en dólares.

Según los últimos números del BCRA, los depósitos en dólares del sector privado pasaron de u$s17.397 millones el 15/09 a u$s 16.369 millones al 28/09 (último registro oficial disponible). Es decir, cayeron en 1028 millones de dólares desde los anuncios del Gobierno. A razón de u$s 102 millones diarios.

La aceleración en los retiros netos de depósitos se potenció a partir del 18/09. Ese día hubo retiros netos de los bancos por u$s 98 millones. Al día siguiente la salida de depósitos fue de u$s 54 millones.

Y en los últimos 4 días (disponibles) aceleró el monto diario de extracción, especialmente de las cajas de ahorro en dólares, y los depósitos cayeron u$s108 millones el 22/09, u$s 220 millones el miércoles 23/09, u$s 237 millones el jueves  24/09 y u$s 177 millones el viernes 25 de septiembre. El lunes 28 la salida se redujo a 83 millones.

Este ritmo de retiro de los últimos días es preocupante. Más aun si tenemos en cuenta que la atención bancaria sigue bajo el sistema de turnos online (que pueden otorgarse a 10 -20 días de plazo) y limita el número de extracciones diarias.        

El Gobierno decidió reprimir fuertemente la demanda de dólares en el mercado oficial de cambios. “Achicó” el acceso al “dólar ahorro” a solo un millón de personas físicas para el mes de octubre. Pero no esta dando señales para aumentar la oferta de dólares en el mercado de cambios que permitan al BCRA recomponer las reservas netas . Por otro lado, tampoco se tomó ninguna medida para aumentar el rendimiento de los depósitos a plazo fijo en pesos, que pierde frente a la inflación esperada y la suba de los dólares alternativos que marcan las expectativas de devaluación.

Para recobrar la confianza es necesario que el Gobierno avance rápidamente en medidas que permitan aumentar la oferta de dólares para los próximos meses y aumente la tasa de interés. En momentos de semejante incertidumbre económica, es mejor que el equipo económico sobreactúe en sus decisiones y no se quede corto, corriendo desde atrás la dinámica de la crisis. De lo contrario, será difícil evitar una “devaluación desordenada” del tipo de cambio oficial y su consecuente “fogonazo” inflacionario.

Martín Guzmán y el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, trabajan contrarreloj para realizar los anuncios.