Hay 5 canales principales a través de los cuales entran los dólares al país. Algunos se consideran más “genuinos” y estables como las exportaciones, el turismo receptivo y la inversión extranjera directa. Asociados a capacidad de la economía de generar sus “propios” dólares en el futuro. Mientras que otros, en países como la Argentina, son más coyunturales e inestables, como ser los préstamos (públicos y privados) y las inversiones financieras, el llamado "dinero caliente" que pueden entrar o salir del país con un click en la pantalla.
En cuanto a los dólares que “salen” del país, tenemos el pago de importaciones; los viajes de argentinos al exterior; el pago de intereses de la deuda en dólares; el giro de utilidades y dividendos de las empresas multinacionales a sus casas matrices; y la famosa "fuga de capitales", aunque ésta ultima no siempre significa que los dólares se retiren físicamente del país. Se define como "fuga de capitales" o "dólares para atesoramiento" a la compra de dólares por parte de los argentinos para ahorrar en el colchón, en cajas de seguridad o cuentas del exterior. Son ahorristas o empresas locales que compran dólares con sus pesos y no los depositan en el sistema financiero local. No necesariamente salen del país, como ocurre con los dólares en cajas de seguridad o en el colchón, pero sí del circuito formal de la economía.